fue un teólogo, filósofo, músico y médico alemán muy reconocido por su trabajo humanitario en África. Fue laureado con el Premio Nobel de la Paz en 1952.

En cuanto a la teosofía, aunque no se le conoce por su implicación directa con este movimiento, sus enseñanzas y filosofías comparten similitudes. La teosofía es una corriente espiritual que se fundó en el siglo XIX y promueve la búsqueda de conocimiento divino directamente a través de la experiencia personal. Se centra en la idea de que existe una verdad universal que subyace a todas las religiones y que puede ser accedida a través del estudio, la reflexión y la meditación.

Schweitzer, en su teología, también promovía la idea de un amor activo y empático hacia toda la creación, un concepto que llamó «Reverencia por la Vida», que refleja la interconexión y unidad inherentes en la teosofía. Además, su enfoque ético en la humanidad y la naturaleza comparte la perspectiva holística y unificada de la teosofía.

Por lo tanto, aunque Albert Schweitzer no fue teósofo, su filosofía de vida y su teología tienen puntos en común con la teosofía, especialmente en términos de respeto y amor hacia toda la vida, la importancia de la experiencia personal en la comprensión de la divinidad, y la búsqueda de una verdad universal más allá de las divisiones religiosas.